No es que TikTok se vaya a hundir, porque probablemente no ocurrirá, pero sí que van a cambiar muchas cosas en el entorno de la empresa. Estados Unidos ha puesto fecha para que Bytedance, la propietaria de la app, haga la venta de la aplicación y que así quede fuera de control chino. Lo más probable es que se lleve a cabo la venta, pero su CEO no ha querido esperar para ver qué ocurre y ha dejado el cargo.
Kevin Mayer, que era el CEO de TikTok hasta ahora, pero solo desde hace unos meses, puesto que entró en la empresa en el mes de junio. Prácticamente ni siquiera ha tenido tiempo de calentar la silla, de darle su forma o de decorar su oficina. Todo ha sido muy repentino.
Lo trágico de lo ocurrido, en cierta manera, es que Mayer venía de ocupar un importante puesto en Disney. Había sido uno de los candidatos para alzarse con el control de la compañía, pero aunque tuvo muchas papeletas para ello, al final no obtuvo el ascenso. Eso le llevó a preferir salir de Disney en busca de una oportunidad en otra empresa que le permitiera ocupar el puesto de CEO con el que tanto tiempo había estado soñando.
Ahora podemos ver que se trató, sin duda, de una idea terrible. Estar en el paro posiblemente no sea un problema para Mayer, que no tardará en encontrar otro puesto y que sin duda debe tener fondos suficientes como para mantenerse en el dique seco el tiempo que sea necesario. Pero su salida de TikTok, repentina y en vistas de la venta a una compañía externa, ha resultado sonada.
También hay muchas preguntas acerca de porqué el CEO ha abandonado cuando podría haberse quedado hasta la venta e incluso haber mantenido su puesto. Algunos rumores dicen que la dimisión es el resultado de alguna que otra llamada que ha recibido por parte del gobierno norteamericano, quien usaría esta falta de CEO para seguir presionando en la venta de la compañía.