Las cifras son espectaculares. El mercado del delivery ha crecido en España de una manera impresionante. En comparación a los niveles prepandemia, se ha producido un aumento del 80%, alcanzando unas ventas de 2600 millones de euros.
El mercado se ha volcado en la comida a domicilio, así como en otros tipos de servicios de delivery. Anualmente se están registrando unos 400 millones de pedidos. Si se pone la cantidad en perspectiva, se puede ver que se trata de una cantidad absolutamente apoteósica, sobre todo por la forma en la que los datos parecen mantenerse después de la pandemia.
Uno de los miedos que había para las empresas que se volcaron en el delivery durante la pandemia, era que, cuando todo volviera a la normalidad, su popularidad se vería muy afectada. Pero lo cierto es que esta caída, al menos de momento, no se ha producido.
Con estos datos, el delivery ocupa un 7% de la facturación global que tiene el mercado de la restauración en España. Si bien proporcionalmente todavía ocupa una pequeña parte, hay que ser conscientes de su crecimiento y de lo que supone, en especial si el progreso no se estanca y continúa adelante.
Otro de los datos interesantes que se han desvelado es que el pedido medio suele incluir 2,8 personas, mientras que el valor de cada comensal se encuentra en alrededor de 6,4 euros. No obstante, son datos bastante generales y posiblemente poco realistas, dado que no suele ser sencillo pedir comida por un valor de 6,4 para cada persona.
Se indica, por otro lado, que un 54% de los pedidos se hace online, mientras que todavía hay un 46% de los pedidos que se llevan a cabo por teléfono, lo que no hay duda de que sorprende. Es muy posible que dentro de unos años el porcentaje haya cambiado y se decante más por los pedidos online.