Las consecuencias y efectos de la pandemia se están notando a todos los niveles de una manera impredecible. En el sector tecnológico se ha visto cómo las ventas de dispositivos móviles comenzaban a anclarse debido a que los usuarios, en estos momentos, no quieren gastarse tanto dinero en renovar el teléfono. O, en algunos casos, no se quieren gastar absolutamente nada, motivo por el cual han comenzado a tomar la decisión de alargar la renovación de sus móviles. En contraposición a esto, el equipo tecnológico que se está vendiendo más es el del ordenador personal.
Quién lo iba a decir, puesto que el PC había entrado en caída libre tiempo atrás, con unas ventas que iban bajando debido al aumento de popularidad de los smartphones de gama alta y los tablets. Pero la pandemia ha puesto en activo el teletrabajo en miles de empresas, y eso ha llevado a que muchísimos trabajadores tengan que comprar un ordenador.
Por ello, las ventas se han impulsado en este 2021 de una manera extrema. Han aumentado tanto que los fabricantes se han encontrado en una situación de desabastecimiento, algo que no ocurría desde muchísimo tiempo atrás.
Con este aumento de ventas, el mercado del PC va a conseguir recobrar la autoestima. Esto podría llevar incluso a que haya marcas que comiencen a probar ideas nuevas, sobre todo teniendo cuenta las necesidades que tiene este nuevo grupo de usuarios que han comenzado a salir de debajo de las piedras. También debería haber un repunte de las ventas de monitores, ya que muchos de los profesionales que se están haciendo con un ordenador con motivo del teletrabajo han optado por un PC de sobremesa.
Buena parte de esta vuelta a la acción por parte de los ordenadores se debe al bajón que sufren los tablets y a la situación estable de la que hablábamos en cuanto a la venta de móviles.